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¿Por qué usted nunca debe declarar ser un ciudadano de los Estados Unidos?

Muchas personas no ciudadanas no comprenden el riesgo que puede llegar a ser el fingir ser ciudadano de los Estados Unidos. Una vez que una persona declara falsamente ser ciudadano Estadounidense para poder obtener algún beneficio federal o conforme a las leyes estatales, él o ella puede ser removibles (deportarles) de los Estados Unidos. Una persona puede ser puesta en proceso para ser removida del país aun si declara ser ciudadano Estadounidense sin querer o a ciertas personas o entidades privadas que administran un beneficio del gobierno.

Es sumamente serio el ser acusado de hacer una falsa pretensión de la ciudadanía, porque si una persona es deportada, sobre esta base, él o ella son permanentemente inadmisible y no puede regresar a los Estados Unidos.

Algunas de las declaraciones más comunes son:

  • Registrarse para ejercer el voto en elecciones a nivel local, estatal, o federal cuando está prohibido por ley hacerlo
  • marcar el recuadro “Ciudadano Estadounidense” en una forma de verificación de empleo I-9
  • declarar ser ciudadano Estadounidense en una solicitud de estudios para obtener un préstamo
  • el tratar de obtener un Pasaporte Estadounidense; y
  • declarar ser ciudadano Estadounidense para obtener cualquier beneficio para el cual se requiera ser ciudadano Estadounidense.

Las personas no ciudadanas deben de tener cuidado cuando soliciten una licencia de conducir o cuando se trate de cuidar de otros asuntos en su oficina del gobierno local. De acuerdo a la Ley de Vehículos de Motor de 1993 (también conocida como la “Ley de Motor Voter”), los Estados deben proporcionar a las personas la oportunidad de registrarse para votar cuando solicitan o renuevan sus licencias de conducir. Sin embargo, mientras que una minoría de estados pedirá prueba de ciudadanía en el momento de la inscripción de votantes, los empleados en la mayoría de los estados no pueden preguntar sobre el estatus de ciudadanía antes de pedir a los no ciudadanos si desean inscribirse para votar.

En algunas jurisdicciones, usted certifica la ciudadanía estadounidense, simplemente mediante la firma de la solicitud de los votantes. La reivindicación de la ciudadanía estadounidense se encuentra en la “letra pequeña” de la forma. En otros estados, es necesario marcar una casilla para indicar la ciudadanía estadounidense, pero un funcionario del gobierno (o cualquier otra persona que usted autoriza a completar el formulario en su nombre) puede marcar la casilla por usted. Estas situaciones han creado problemas a los no ciudadanos que pueden no entender Inglés bien, no prestar atención a lo que están firmando, o confiar en los demás para completar los formularios en su nombre.

Peor aún, algunos no ciudadanos están mal informados acerca de su elegibilidad para votar. Por ejemplo, un trabajador de la campaña puede decirle que los residentes permanentes (poseedores de tarjeta verde) pueden registrarse para votar, aun cuando no son elegibles, o un representante electoral puede tocar a su puerta para pedirle que se registre y darle información incorrecta. Usted debe consultar con un abogado de inmigración para ayudarle antes de presentar una solicitud para su residencia, ciudadanía, o respecto a cualquier otro beneficio de inmigración porque usted no puede ser elegible si descubre que se registró para votar cuando no estaba autorizado para hacerlo.

Una persona no ciudadana nunca debe marcar la casilla “Ciudadano Estadounidense” en su I-9 con el fin de obtener un trabajo si no es verdad, incluso si la persona no ciudadana está autorizada para trabajar en los Estados Unidos mediante una tarjeta verde o un Documento de Autorización de Empleo. Los no ciudadanos también deben ser conscientes de que la solicitud de préstamos estudiantiles no sólo puede conducir a una audiencia de expulsión, sino que también puede desencadenar cargos criminales por robo, fraude y otros delitos que tienen consecuencias migratorias.

Para poder obtener un pasaporte de Estados Unidos, los solicitantes deben presentar pruebas de ciudadanía estadounidense. Si usted llega a mentir en esta solicitud y presenta un certificado de nacimiento falso o cualquier otra prueba de ciudadanía Estadounidense, un no ciudadano no solo corre el riesgo de ser acusado de hacer una afirmación falsa de ciudadanía de EE.UU., sino también cargos criminales. Del mismo modo, puede ser puesto en proceso de deportación por presentar una solicitud para obtener un certificado de ciudadanía estadounidense si no tiene derecho a uno.

Recuerde que las solicitudes de inmigración también son “solicitudes de gobierno”. Por ejemplo, si usted presenta una solicitud para ajustar su estatus a residente permanente, en su entrevista los oficiales de los Servicios de Inmigración y Ciudadanía (USCIS) pueden preguntar si alguna vez ha hecho una declaración falsa respecto a la ciudadanía. (Esto ocurre a pesar de que en la solicitud de papel, el Formulario I-485, no se hace esta pregunta.) Si usted no será capaz de contestar honestamente que nunca ha hecho tal afirmación falsa, consulte a un abogado de migración.

Además de las situaciones mencionadas anteriormente, los oficiales del USCIS han descubierto declaraciones falsas a la ciudadanía en otras circunstancias, como las personas que se declaran los ciudadanos estadounidenses sobre las solicitudes de hipotecas respaldadas por el gobierno federal con el propósito de comprar una casa.

La conclusión es que hay muy poco que uno puede hacer si se  llega a determinar el haber hecho una declaración falsa de ciudadanía. Generalmente las excepciones son que la declaración falsa fuese hecha por un niño, el único recurso disponible para una persona que ha hecho una declaración falsa de ciudadanía estadounidense es buscar la cancelación de deportación en la Corte de Migración. Para calificar para este tipo de beneficio, sin embargo, se requiere una muestra de buen carácter moral para los residentes no permanentes (no-LPR). El problema es que un juez puede determinar que un no-residente permanente legal que hace una declaración falsa de manera intencional respecto a la ciudadanía carece de buen carácter moral. Si la declaración falsa no fue intencional, y se cumplen todos los demás requisitos, la cancelación de remoción puede ser una buena opción.

 

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